Damanhur en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima

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Entre el 7 y el 12 de noviembre Macaco ha participado en la conferencia de las Naciones Unidas sobre el clima, que se realiza cada 22 años, el COP22. Este año ha sido organizada en Marrakech y, gracias a la participación de Damanhur en la Global Ecovillage Network (GEN), Macaco ha estado presente como delegada.
La GEN participó en el acontecimiento con 20 representantes, de los que casi todos han presentado un proyecto en una de las grandes salas de conferencias. La presencia de Ban Ki Moon, secretario general de las Naciones Unidas, de ministros de casi todos los estados, de algunos presidentes, del Rey de Marruecos, de millares de personas y muchos ONG’s ha permitido tener muchos contactos y hablar del movimiento de las ecoaldeas y de Damanhur. La GEN también ha firmado un acuerdo con el gobierno marroquí para aumentar el número de los ecoaldeas en Marruecos.
Macaco ha presentado nuestro hermanamiento con Guedè Chantier en Senegal, llevándolo como un ejemplo de acción práctica para implementar los objetivos para el Desarrollo Sostenible (SDG en inglés), de la ONU. Ya presentó el hermanamiento a la ONU a finales de septiembre en Ginebra en el Consejo de Derechos Humanos. Ha sido una gran oportunidad para poder hablar de nosotros, en cuanto somos un ejemplo concreto, que pone en práctica muchos de los SDG y más cuando hemos puesto en marcha objetivos para países en desarrollo.
Marrakech ha sido un marco fascinante para este acontecimiento, aunque Macaco ha tenido poco tiempo para explorarla, ha podido saborear un poco la atmósfera de las mil y una noche.
Sucedió después un episodio curioso: cada tarde atravesaba la gran plaza volviendo de la COP para ir al hotel, dónde todos los participantes de la GEN se alojaban. Por la noche la plaza estaba siempre llena de gente, de espectáculos improvisados, animales de muchas especies, mercados, percusiones hipnóticas, etc, parecía un poco como estar en la edad media oriental. También había algunos pobres macacos atados con cadenas para que la gente se fotografiase con ellos. Un macaco pequeño trató de robar la llamada self (joya) de Macaco, pero llegó a tiempo parando la mano del pequeño macaco, el que se asustó al ser pillado, parecía ser bien consciente de haber hecho algo erróneo…
A Macaco le dio una gran tristeza ver a estas pobres criaturas, que parecen personas, esclavizadas y entrenadas para robar, por no hablar también de la situación de las mujeres. Aunque al mismo tiempo, es difícil no quedar fascinado por la belleza y exoticidad del lugar.